El centro de gravedad es un concepto físico cercano al del centro de masas.
La diferencia radica en que la resultante de las fuerzas que lo determinan se refieren a las de la fuerza de la gravedad.
En este caso, tampoco tiene porqué ser uniforme la densidad ni, lo más importante, a lo largo del conjunto material el valor de la aceleración de la gravedad g tiene necesariamente que ser constante.
Si un cuerpo descansa sobre una base horizontal plana y si la vertical que pasa por el centro de gravedad del cuerpo corta en algún punto a la base de apoyo, el cuerpo permanecerá en equilibrio estable. En caso contrario, caerá.
Un ejemplo: el monte Fuji. Podríamos asimilarlo a un gran cono. Su geología volcánica hace que su densidad claramente no esté uniformemente repartida. Además, en su cima, a 3776 m, el valor de la gravedad es g = 9,798 m/s2, inferior a la gravedad en la base del monte. El centro de gravedad del monte Fuji estará por debajo de su centro de masas:
